Mientras peregrina aferrado al milagro del “Sí se puede” pero visita ciudades/zoológicos en las que solo puede conservar los votos que cosechó en las PASO, el gobierno en retirada siembra incertidumbre en áreas sensibles que afectan a todos los actores de la actividad pesquera.
En esto de generar incógnitas no distingue sectores. Desde la Intercámara observan cómo se va llenando el tablero de áreas para explorar hidrocarburos y todavía no hay señales del mapa de sensibilidad para preservar a los recursos en la zona.
La semana pasada se sumaron otras tres empresas. ENI Argentina Exploración y Explotación, Memplo y Tecpetrol fueron autorizadas mediante la Resolución 645 de la Secretaría de Energía para explorar un área off shore con una extensión de 4400 km2 en el litoral patagónico.
Más allá de la conformación de ese Grupo de Trabajo entre Pesca y Energía, las cámaras empresarias advierten un avance importante en el otorgamiento de licencias sin el aval del estudio de impacto ambiental. Uno serio y hecho como corresponde. No el de una consultora que trabaja para las propias petroleras.
El próximo 14 la intercámara se reunirá en Mar del Plata y ese punto será uno de los que figuren en agenda. Otro sin dudas serán las trabas persistentes que coloca Brasil con los productos pesqueros que intentan cruzar su frontera.
Algunas quejas escuchó Dante Sica cuando el viernes pasado se hizo un tiempo tras el Coloquio de IDEA y recibió a industriales de diversos sectores en el Torreón del Monje. Pese a las repetidas reuniones entre SENASA, Cancillería y diplomáticos brasileños, los obstáculos continúan.
El anuncio del ministro Etchevehere sobre la reapertura del mercado brasileño para el langositno patagónico, allá por junio, fue un manojo de buenas intenciones. A más de 100 días del anuncio, ni un solo cargamento se animó a cruzar por miedo a quedar retenido en observación o directamente, rechazado.
No hay optimismo para que esta situación se revierta. Sica escuchó lo importante que es el mercado brasileño para la industria pesquera, especialmente la marplatense, por su proximidad, pero más allá de ordenar nuevas gestiones, entre los industriales sobra el pesimismo.
Uno de los interrogantes más tangibles es la manera en que se reglamentará el Decreto 145 de modernización de flota en lo que refiere a los aranceles a la importación de buques que se construyan en España, básicamente.
Ya la reglamentación de la transferencia de permisos de pesca a nuevas embarcaciones generó polémica pues otorga un 15% adicional de poder de pesca a los barcos construidos en el extranjero. Esa ventaja no figura en el Decreto firmado por Macri.
Si en la industria naval ya estaban preocupados por los dichos de Nuñez Feijoó con los esquives de Etchevehere y Sica, ya van preparando el pañuelo. Nada invita a pensar que no se oficialice la rebaja de aranceles y Moscuzza pueda pagar el 7% en lugar del 14% por los dos barcos que cruzan el Atlántico en estos momentos.
Sería un gesto obsceno; otra resolución de Pedidos YA, esta vez desde la Secretaría de Industria, ajustada a las necesidades de Pototo. El último de una colección que ya puso en jaque un recurso como el langostino con el “Jose Américo” y ahora toda una industria que emplea a más de dos mil obreros navales con su gemelo “José Marcelo”
El mal menor sería poner la vara en los 45 metros. Esa eslora no tiene tanto impacto en la industria local. Pero es posible que sea mucho menos. Será un curioso interrogante porque el “José Marcelo” mide 47 metros pero Bosch declaró en una Resolución que mide 39,90 metros.
Si oficializa la rebaja este gobierno dinamitaría el puente que esta misma gestión construyó a partir de la firma del Decreto 145. La bala en el pie, pero no accidental, sino planificada. Todo por satisfacer a un empresario amigo que se ha llevado todo por delante.
En Mar del Plata también hay gente preocupada. Después de las PASO comenzaron a demorar la devolución de IVA, escasear la prefinanciación de exportaciones y los dólares de créditos para construir buques. Los industriales creen que si el domingo se consuma la derrota, el panorama hasta el 10 de diciembre será un vía crusis por el desierto, con anchoas como casi único menú.
En ese desierto ya caminan los trabajadores. Desde el SOIP se quejan por estas horas que no hay noticias del subsidio prometido por liberar el Ministerio de Trabajo. Son más de 7 mil obreros entre registrados y precarizados que aguardan a la expectativa mientras en el gremio completan y completan planillas y formularios.
Una burocracia estatal al servicio de la gambeta que fue interrumpida ayer miércoles con una nueva toma de la Delegación del Ministerio de Trabajo Provincia. La usina de promesas que no se cumplieron.
La misma gambeta que sufren los industriales que quieren recibir aunque sea una parte del financiamiento anunciado por la gobernadora al pie de la banquina chica. Papeles, balances, inscripciones, post balances, garantías.
Nadie fue al Banco Provincia porque de los 6 millones de tope que tiene el crédito, solo el 20% esta destinado a financiar capital de trabajo. Un camión de merluza que tiene la suerte de pasar la frontera brasileña vale 4,2 millones.
Más anuncio de campaña que apoyo verdadero para promover el sector. No importa cuando leas esto.
Foto: Pescare