Transmallo Sur SRL cobrará casi 11 millones de pesos por poner en valor el edificio del Centro de Formación Profesional que el Consorcio Portuario piensa inaugurar en marzo en el puerto marplatense. Se creó en medio de la pandemia, su principal actividad son las reparaciones navales y para la UOCRA no tiene trabajadores registrados. Su sede es una casa de familia.
Luego de dos fracasos del proceso licitatorio el Consorcio Portuario Regional Mar del Plata adjudicó a través de una compulsa de precios a la empresa Transmallo Sur SRL la obra de mejoras en el edificio del Centro de Formación Profesional que montó en jurisdicción del puerto y con el que pretende enseñar oficios, entre ellos el de fileteado, para generar alimentos de calidad a 40 mil chicos de comedores escolares de Mar del Plata.
El presupuesto oficial para realizar las mejoras ascendió a los 11.714.167,30 pesos. Las dilaciones en la adjudicación –la apertura de sobres de la primera licitación fue el 7 de octubre del 2022- elevaron el monto original, previsto en 8,5 millones de pesos.
Transmallo Sur SRL siempre fue la empresa que presentó la cotización más baja: 10.890.000 pesos IVA incluido, para poner en valor un predio que se ubica en la parcela 12ª, sobre calle “BP San Antonino II”, entre “BP Pampero” y el límite con la Playa, dentro de la zona industrial del puerto local.
La primera curiosidad que genera el caso no es que Transmallo se creó en diciembre del 2020, en medio de la pandemia, sino que su principal actividad es la de construcción y reparación de artefactos navales y construcción de estructuras flotantes. Recién en noviembre del 2021, sumó a sus servicios el de construcción, reformas y reparaciones de edificios.
Sus socios son Carlos Gustavo Pèrez y su esposa, Verónica Laura Rolon. La sociedad se formó con una entrega de capital de 100 mil pesos. La empresa funciona en Génova 4507 (Foto), suponemos, la casa familiar del matrimonio. La pareja también integró la sociedad Sea Work en 2011, con la que iniciaron el camino en el rubro de reparaciones navales como contratistas y desfilaron por algunos astilleros y muelles del puerto.
Por qué el Consorcio contrata a una empresa cuya principal actividad no se vincula con el propósito de la licitación y apenas tiene un año de antigüedad. En principio porque el reglamento de contrataciones no se lo impide ni tampoco parece que piden antecedentes. Alcanza con presentar la oferta más baja.
“Todo el proceso se encuadra dentro de la normalidad. Incluso pudimos adjudicar de manera directa tras el fracaso de las dos licitaciones y sin embargo realizamos la compulsa de precios”, aseguran en la administración portuaria
Los constructores de buques debieron reparar y sellar de fisuras en frentes y medianeras por una extensión de 986 m2, reparar revoques, mochetas y dinsteles, revoque de la medianera oeste y tapado de agujeros, así como aplicar dos manos de fijador y pintura.
Sobre el techo de hormigón van a retirar membrana y limpiar el área de 380 m2 con hidrolavadora, aplicaran una nueva membrana geotextil de 4 mm; deben cortar el techo y colocar canaleta y 7 embudos, con una intervención en contrapiso y carpeta. Por todo esto, 11 millones.
La otra curiosidad es que los 9 obreros que Trasmallo Sur SRL dispuso para trabajar en el predio no los tiene bajo relación de dependencia. Lo aseguraron desde la UOCRA, el gremio de la construcción, tras fijarse en el IERIC, el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción. “No están registrados”, aseguraron en el gremio.
Desde el Consorcio remarcan que la empresa cumplió los requisitos que plantea el reglamento de contrataciones para adjudicarse la obra. Y que no se paga el trabajo hasta que no muestren las altas del 931 o la correspondiente factura por los servicios prestados.
El Centro de Formación piensa arrancar el ciclo lectivo 2023 en marzo próximo. Fue anunciado en el invierno del 2021 con objetivos ambiciosos. La planta procesadora-escuela tendría capacidad para transformar casi 58000 kilos de pescado por semana en unos 30000 kilos de filet, suficientes para atender la demanda de los comedores escolares de General Pueyrredon, dijeron en el Consorcio.
Un dato alcanza para refutar esos números… Para procesar esa cantidad de pescado hoy en cualquiera de las plantas ubicadas en el barrio puerto se requiere de más de 100 trabajadores que asistan 8 horas de lunes a viernes
No parece necesitar la industria un centro de formación de fileteros cuando casi es un oficio en extinción, la flota merlucera comienza a descargar en puertos patagónicos y el langostino gana cada vez más terreno en Mar del Plata.
Más allá que no se sabe de dónde surgirán los fondos para comprar las casi 250 toneladas de pescado por mes para la escuelita, lo vital del proyecto parece ser la creación de una nueva estructura con cargos y funciones que deben completarse: gestión operativa, comercialización, administración, instructores docentes y coordinadores para formar 200 alumnos por cuatrimestre.
Los antecedentes no son alentadores. En la prueba piloto que representó el ciclo lectivo 2022 en la Escuela Nacional de Pesca, el curso de fileteado tuvo la participación de menos de 20 alumnos