Por la pandemia hay una reducción de inspectores embarcados y en tierra. En el Distrito Pesca no se termina de ir Leandro Marina ni de llegar Ariel Barciela pero las riendas siguen en manos de Ayelén Fortunato. El SIMAPE pide por un coordinador de embarcados para que determinados inspectores no vayan siempre a los mismos barcos. Garantiza respaldo para que Liberman sume nuevos inspectores alineados a La Cámpora.
Quien camine el muelle 2 y 3 donde opera la flota congeladora es frecuente encontrarse con marineros que se bajan de los buques factoría con la propina guardada en grandes bolsos negros. Como muchos son de Corrientes y en la combi que los lleva de regreso no hay lugar suficiente para semejante equipaje, venden los chorizos de filet de merluza al mejor postor por la urgencia del viaje. Walter, el del tractor de la estiba, es uno de los que compra pescado o langostino sin necesidad de salir del puerto.
Los chorizos que produce la flota congeladora deberían ser elaborados con los recortes de las máquinas fileteadoras automáticas con que están equipados los barcos y cuyo coeficiente de conversión está siendo discutido por estos días.
Las empresas le han solicitado a Leandro Marina, el designado nuevo director de Control y Fiscalización y responsable del Distrito en Mar del Plata, la necesidad de mantenerlos como están, muy ventajosos para las empresas que pueden estirar el cupo de merluza asignado a límites insospechados; sin contar con las nototenias ni estas licencias de embutir los chorizos con filet de primerísima calidad.
Una trampa que se mantiene; solo cambian los nombres y apellidos que la avalan. Elias, Salomón, Gismondi, Canale y ahora Marina y cía. Carlos Nicolau, un ex marino de Bahía Blanca en el gobierno anterior fue el único que intentó cambiar la corrupción enquistada. Como no pudo se fue aunque antes de irse habría presentado una denuncia penal en la justicia federal,
Hace unos años hablé con él para conocer más detalles de la presentación pero Gismondi evitó pronunciarse al respecto. Más allá de su silencio hubo portales de noticias que reflejaron parte de la exposición presentada ente el Juez Inchausti..
Si alguna vez la trampa termina no será en estos días de ausencia absoluta de controles a bordo. De los 30 inspectores embarcados que dispone el Distrito Pesca Mar del Plata, más de la mitad está lejos del muelle a resguardo del covid-19. Al inicio de la pandemia algunos inspectores embarcaron y se contagiaron a bordo.
En julio y septiembre, por ejemplo, no hubo ningún sorteo de inspectores para subir a barcos pesqueros. En agosto hubo dos sorteos que involucraron a sólo 18 barcos buques tangoneros. Todos los demás salieron liberados, lo mismo que todos los arrastreros que van a merluza y especies australes.
Marina no desembarcó todavía en Capital pero sigue regenteando el Distrito donde era Jefe hasta este ascenso. Inspector con casi 20 años de antigüedad en el muelle, ladero de Javier Faroni desde las entrañas del Frente Renovador en la Costa Atlántica, se respalda en su amistad con Ayelén Fortunato, la hija de Oscar, quien se desempeña como Jefa de Personal en el Distrito y la dueña del poder en las sombras.
Tanto poder tiene Ayelén que como mera empleada administrativa es común verla arriba de barcos pesqueros: congeladores, generalmente. La han visto en uno de los API de Iberconsa y en un arrastrero de Moscuzza. Qué tiene que hacer ahí arriba, en carácter de qué misión propia de su función se requiere que suba a un barco es un misterio tan grande como la coincidencia en las actas de descarga y los partes de pesca en los días de Marina inspector en muelle.
“Es un buen pibe”, lo amparan en el massismo local, donde no creen en la caja millonaria que maneja. Si es que existe el massismo local más allá de algún concejal cansado de la intrascendencia.
Con poco tiempo para caminar los muelles como antes, Marina tiene en Leandro Bustacio a su hombre de confianza para arreglar los cajones en el fresco. Cuando no hay que subdeclarar raya hay que alivianar los kilos en los de merluza. Algunos armadores se pasan de 40 kilos cuando no deberían superar los 35. Son kilos que no descuentan del cupo y como no existen, no se facturan. Win-win
Nada nuevo bajo el sol. Algo que pasa hace años y no se detendrá tampoco en esta gestión de Marina, sea como Jefe de Distrito o Director Nacional. En tierra también el cuerpo de inspectores se ha disminuido como consecuencia del covid.
Ariel Barciela, el reemplazante de Marina en su demorado ascenso, no tiene urgencias por asumir el mando y tampoco viene a cambiar nada. Barciela sabe del poder de Ayelén. Todos se conocen del Club Pueyrredon donde aprendieron los valores del rugby. Que no llegaron a los muelles, claro.
Jorge De Negris parece más apurado aunque allegados al dirigente del SIMAPE nieguen que haya viajado a Buenos Aires a entrevistarse con Liberman y pedirle que designe a Miguel Vega como Coordinador de los inspectores. En el gremio pretenden lavarle la cara al Distrito y creen que el inspector es el hombre indicado. «Se habla de que quieren incorporar 15 inspectores; no tendríamos problemas»; reconocen en el gremio.
En la anterior gestión el Coordinador era un cargo que desempeñó Alfonso Fernández, pero fue desplazado al igual que Angel Roig, el hijo del ex Intendente de Mar del Plata, con la llegada del nuevo Subsecretario de Pesca. La caja del Distrito quedó en poder de Massa por obra y gracia de Raverta. Con ANSES, alcanza.
Vega es el delegado de los inspectores del gremio y su rol como Coordinador sería vital para determinar qué inspectores sube a los congeladores y quién a los fresqueros.
Si bien existe un sorteo que determina qué inspectores va a cada barco, en el gremio descreen del mecanismo y escuchan de manera reiterada a sus afiliados lamentar que “siempre van los mismos a los mismos barcos”; lo que dejaría en evidencia que lo del sorteo, es una puesta en escena.
Sobran motivos para digitar inspectores amigos en determinados barcos. Un pasaje que puede tener una recompensa de miles de pesos. Más de 250 mil en un congelador y algo menos de 90 mil en un fresquero. Con sus respectivas diferencias entre quien va a langostino y quien va a merluza.
Si Marina y Liberman avalan el nombramiento de Vega en el gremio reiteran que no tendrían problemas en que el Subsecretario oficie de reclutador de nuevos inspectores provenientes de La Cámpora para cumplir las vacantes que ha dejado la pandemia.
Lo curioso es que el SIMAPE no es signatario de convenio con el Estado. Esta ATE y UPCN, donde están buscando reincorporar a algunos despedidos en la anterior gestión, como Vespa, Corzo y Goycochea. El sindicato de pescadores también tiene algunos afiliados que espera volver a poner en funciones: Marcos, Arrieta y Toledo.
El tiempo dirá si el destino de Leandro Marina efectivamente está en la Dirección Nacional y será el responsable de todos los distritos del litoral marítimo o deberá conformarse con ser el copiloto de Ayelén en Mar del Plata
Es lo de menos al fin y al cabo porque donde aterrice “el renovador” hará muy poco para cambiar este sistema de control corrupto que a fuerza de subdeclaraciones, mentiras y complicidades, sigue contribuyendo a una caja donde la política se alimenta de dinero fácil en desmedro de la fiscalización y control de las capturas que realiza la flota pesquera.